Vacaciones y ansiedad por separación

Un problema muy extendido

Vacaciones y ansiedad por separaciónYa hemos hablado de la ansiedad por separación en otras ocasiones, pero incidimos de nuevo en ello por las fechas en las que nos encontramos y la enorme importancia del problema en la convivencia diaria. Algunas estadísticas citan la ansiedad por separación como la segunda causa de eutanasia canina y la primera de abandono. Entre un quince y un veinte por ciento de los perros la padecen, y no hay una edad concreta, aunque sí algunos desencadenantes identificados (y la vuelta de las vacaciones es uno de ellos).
Vuelta a la vida real
Las vacaciones son un momento excelente para disfrutar de nuestros perros. Tal vez a escondidas, o con suerte amparados por la legislación, nos los llevamos a la playa, después de picoteo, luego otra vez al campo… Todos disfrutamos del tiempo que pasamos juntos, pero tal vez estemos en las puertas de un problema serio.
Septiembre es el mes de los coleccionables en los quioscos, de la vuelta al cole, y también de la ansiedad por separación. Todo ese tiempo que hemos pasado con nuestros perros puede tener un “efecto rebote”, y provocar un cuadro de ansiedad que podemos evitar con unas pautas muy simples de realizar.
Lo que debemos hacer
Tal vez no sea el caso, hay muchos perros que no tendrán problemas sea cual sea nuestro comportamiento, pero ante la más mínima señal…:

Todos los días saldremos y lo dejaremos solo. No hace falta que sea mucho tiempo, por ejemplo a desayunar y volvemos, o a comprar el periódico. Un par de veces al día durante quince minutos cada una será suficiente para que el perro sea consciente de que no siempre estamos con él. Si observas lloriqueos… será necesario ampliar el número de veces y poco a poco el tiempo de ausencia, mejor si es después del ejercicio.

Recuerda: nada de aspavientos al salir ni al volver. Saludaremos al perro a nuestra vuelta cuando esté tranquilo, no antes. Nuestro nerviosismo se traslada al perro, no lo dudes ni un momento, ellos lo sienten.

Un ejercicio a practicar: Dejamos al perro en una habitación y nos vamos a otra unos minutos. Con un poco de paciencia es fácil de conseguir y es un ejercicio que nos resultará muy útil en el día a día (por ejemplo para atender a alguien en la puerta, pasar la aspiradora…).

En perros con ansiedad grave no nos servirá de mucho, pero estamos hablando de prevenir el comportamiento indeseado: Le dejaremos un juguete nuevo, no importa cuál, simplemente “algo” que lo mantenga entretenido («hueso» de piel, Kong…).

Estas simples pautas realizadas a diario nos ayudarán a prevenir un problema que -aunque se puede solucionar- no deja de ser un trastorno grave.

2 comentarios en “Vacaciones y ansiedad por separación

  1. Tengo una snhauzher mini y hace algún tiempo ha empezado a romper cosas (zapatillas, juguetes….)cuando lleva un tiempo sola en casa. Pero la cosa ha empeorado mucho desde la vuelta de las vacaciones, ahora ha empezado a morder sillas, muebles, su cama, hasta el papel de wc lo coge y no para hasta que lo ha estirado todo y luego lo muerde y lo rompe. La verdad es que hemos intentado no hacerle caso, no prestarle demasiada atención, darle el cariño justo, pero ya no sé que hacer.Sé que esta conducta es inaceptable, habia pensado en llevarla durante la semana a un almacén que tienen mis padres, allí la podemos ver cada día y el fin de semana traerla a casa. A ver si se acostumbra a estar sola y de aquí a un tiempo llevarla a casa de nuevo. Que opináis??

    1. Hola Ana, lo que propones no solucionaría el problema, simplemente lo trasladaría de lugar o momento (con suerte, si se adapta bien al almacén, la padecería los fines de semana). La ansiedad por separación suele tener buen diagnóstico si se respetan a rajatabla las «reglas del juego», por ejemplo éstas. (El último enlace es muy útil).
      Saludos… y paciencia, con tiempo se soluciona, seguro.

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