Educar y adiestrar, sí pero antes ¿cómo es tu perro?

Por desgracia, actualmente, la pertenencia a una raza indica con mucha más fiabilidad la posibilidad de padecer determinadas enfermedades de transmisión genética propias de esa raza, que mostrar una cierta tipicidad en cuanto a comportamiento asociado a esa selección para un determinado trabajo o cometido.

Educar y adiestrar, sí pero antes ¿cómo es tu perro?Cientos, miles de artículos, vídeos y manuales de adiestramiento y educación canina. Videotutoriales de obediencia, trucos, y todo tipo de trabajos con perros pero prácticamente no existe información acerca de cómo comprender al nuestro en concreto. Es el problema del exceso de información, se avanza sin la base, se quiere terminar sin empezar, se tiene prisa y se olvidan las bases. Entender cómo es el perro como individuo, no como especie o raza, es lo primero y más importante para alcanzar nuestras metas.

Analizar y comprender antes de modificar o crear conductas
Podemos influir en muchas cosas, lograr una cierta obediencia sin grandes conocimientos, podemos incluso llegar a modificar la relación con nuestro perro, crear vínculo (o destruirlo) pero antes de nada debemos tener claro cuáles son nuestras armas, los recursos que nos pueden ser útiles, nuestras herramientas, y su efectividad dependerá de cómo sea nuestro perro.

El análisis DAFO (Debilidades, Amenazas, Fortalezas y Oportunidades) es una herramienta empresarial habitual en el lanzamiento de nuevos proyectos o productos, y es una gran ayuda en la toma de decisiones… Pero es igualmente muy útil en otros aspectos de la vida. Aplicado a los perros nos sobran las Amenazas y Oportunidades, pero podemos evaluar Debilidades y Fortalezas. Imaginemos que analizamos a un hipotético perro -de nombre «Pancho»-, en los diferentes cuadrantes se encontrarían:

Debilidades. ¿Cuáles son los puntos débiles de ese perro en concreto, sus fallos? Es miedoso, o no se centra, o puede que rebelde ante la «autoridad»,  ¿agresivo tal vez, o sólo poco sociable? Pancho es muy tragón, come todo lo que encuentra, no hace demasiado caso, pero no es «malo», sólo un poco despistado.

Fortalezas. ¿En qué destaca el perro que estamos evaluando? A lo mejor es obediente en casa, se relaciona bien con otros perros y/o personas, es apegado al dueño, o…  Nuestro hipotético «Pancho» es juguetón y bastante apegado.

Con estos datos podemos empezar a valorar el caso de «Pancho», y estamos de enhorabuena, porque tenemos las dos armas «de libro» para empezar con buen pie en la educación: comida y juguetes (refuerzo positivo). Una Debilidad (que le gusta comer y de hecho se come todo lo que encuentra por la calle) pasa a ser algo positivo para nosotros si lo aprovechamos. Por otro lado, en las Fortalezas, encontramos que es «bastante» apegado al dueño, lo que también nos ayudará puesto que será igualmente «sentido» con el castigo negativo. Es activo (podremos emplear el juego como «premio»)…

El problema de los tópicos en los perros
Es cierto que las razas predisponen al perro hacia un cierto cometido. Se han seleccionado durante mucho tiempo para ello y las creencias populares, los tópicos, se encargan de hacernos creer que es algo inamovible. Pero no es así. Ni a todos los perros de caza les interesan las liebres o las perdices, ni a todos los border collie les gusta el agility, ni todos los mastines cuidan rebaños… El individuo manda sobre la raza.

De igual modo, podemos encontrarnos con perros a los que no les gusta la comida, o que ignoran las pelotas, perros que necesitan un lugar muy tranquilo para evitar distracciones, otros que se centran con facilidad… Analizando a nuestro perro en concreto podremos aplicar las técnicas adecuadas, emplear los recursos que necesitemos y, sobre todo, los que se adapten mejor a ese individuo (de nuevo por encima de especie o raza). Una vez que sepamos cómo es nuestro perro, ya podremos adaptar toda esa información de la que hablábamos al principio.

Un comentario en “Educar y adiestrar, sí pero antes ¿cómo es tu perro?

  1. Adquiri un mestizo de pitbultiene tres meses de edad y lleva mes y medio conmigo, es obediente y juguetón, fácilmente está obedeciendo y adquiriendo hábitos

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