Se considera el precursor del funcionamiento sintáctico

Aunque muchos de nosotros lo hemos comprobado con nuestros perros, y hace unos meses asistimos a la increíble exhibición de Chaser (una perrita border collie capaz de comprender el significado de 1.022 palabras y las combinaciones de las mismas) ahora se ha realizado un nuevo estudio  en la Clínica Médica de la Facultad de Medicina Veterinaria y Ciencia Animal, Universidad de São Paulo,  Brasil.

La utilización de la sintaxis por los animales no humanos sigue siendo un tema controvertido. En este trabajo se presentan evidencias de que un perro puede responder a las peticiones verbales compuestas de dos términos independientes, una referencia a un objeto y la otra a una acción que debe realizarse en relación con el objeto. Un perro mestizo, hembra, de nombre Sofía, se entrenó inicialmente para responder a la acción («señalar» y «recoger») y al objeto (pelota, palo, botella, oso de peluche…). Después se presentaron peticiones simultáneas, en combinatoria (por ejemplo, buscar la pelota, recoger el oso de peluche…).

Sofia respondió con éxito a las solicitudes de acción con objetos que se presentaron como oraciones simples, y fue capaz de generalizar de forma flexible su actuación en los diferentes contextos. Según los autores del estudio, estos resultados proporcionan evidencia empírica de que los perros son capaces de extraer la información contenida en los mensajes complejos, e integrarlo en las instrucciones concretas, una habilidad compartida con otros animales lingüísticamente capacitados y que puede representar un precursor del funcionamiento sintáctico.

Cómo se entrenó a Sofía
Las sesiones de entrenamiento y las pruebas se llevaron a cabo de dos a tres veces al día,  entre tres y seis veces a la semana en una sala dedicada en el Instituto de Psicología de la Universidad de São Paulo, por un equipo de instructores. Sofía fue adiestrada con clicker y refuerzo positivo.
El adiestramiento de Sofía se estructuró en:

Fase 1. Aprendizaje de los objetos. Sofía era premiada cuando se acercaba a un objeto que se había mencionado previamente.
Fase2. Adiestramiento de objeto y acciones (109 sesiones). Se comenzó a asociar el objeto con una acción (sólo dos objetos). Siempre en orden objeto-acción.
Fase 3. Secuencia de objeto y acciones (164 sesiones). Adiestramiento en secuencia «coger pelota», «señalar botella»… En orden objeto-acción.
Fase 4. Objeto y acción de forma simultánea (130 sesiones). Se combinan los diferentes objetos con diferentes acciones.
Fase 5. Pruebas de control. Con los objetos dispersos y repartidos aleatoriamente. En orden objeto-acción.
Fase 6. Control de comprensión. Para probar la posibilidad de que el rendimiento no fuera realmente aprendizaje de varias sentencias, se invirtió el orden de los elementos oracionales, pronunciando términos de acción antes de los objetos.
Fase 7. Nuevos objetos.
Fase 8. Nueva combinación de elementos.

Fuente: Ramos D, Ades C (2012) Two-Item Sentence Comprehension by a Dog (Canis familiaris).

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