Invirtiendo en el futuro del perro

El próximo mes de febrero tenemos preparados tres sábados de clases para cachorros. Pero ¿son en realidad clases para cachorros o para dueños? Para los dos, pero los perros -los de pocas semanas de vida también- tienen la fea costumbre de dejar en evidencia todas nuestras carencias y cómo nos complicamos inútilmente la vida perdiendo el contacto con lo natural y más simple, con lo esencial.

Clases para dueños de cachorros
Trabajar con un cachorro es en realidad muy sencillo. El problema viene cuando el cachorro tiene que adaptarse a su nuevo entorno. Vienen entonces los problemas de ansiedad por separación, de conductas destructivas, los malos hábitos higiénicos… y también se siembra la semilla de futuros problemas de comportamiento por una deficiente socialización, que en la etapa adulta genera miedo, ansiedad y reactividad.

Los «dueños nuevos», y todos lo somos cuando incorporamos un cachorro a nuestra vida, adquirimos la responsabilidad y el compromiso durante toda su vida. Y esa vida se cimienta en las primeras semanas. Por eso en las clases para cachorros nos centramos en dos apartados fundamentales:

Seguridad del cachorro en sí mismo: Ahora más que nunca (8-16 semanas), los cachorros son esponjas que procesan su entorno… para bien y para mal. La Naturaleza les dota de esa capacidad de aprendizaje para diferenciar entre lo inofensivo y lo peligroso, lo divertido y lo aburrido, pero siempre nos quedarán cosas en el «baúl de lo desconocido». Mediante el juego el cachorro descubre que puede salir «victorioso» de todo tipo de circunstancias y entornos, que las personas son divertidas. Que el mundo es un entorno seguro, y cuando encuentre algo desconocido meses después será algo superable «porque ya lo ha hecho antes». Un cachorro seguro de sí mismo es un futuro perro equilibrado, mientras que un cachorro miedoso, o con pocas experiencias positivas (lo que deriva en inseguridad) difícilmente será feliz.

Formación de los dueños: Nuestro papel como guías es indispensable. Somos su referente y no puede existir otro. A los perros no les gusta improvisar, debemos crear rutinas apropiadas, mostrar el camino en un idioma inteligible para el cachorro. En las clases para cachorros aprenderemos las bases del condicionamiento clásico y condicionamiento operante, lo que es un vínculo sano y otro malentendido. Sentaremos las bases del liderazgo en un entorno con estrés controlado, exigiendo a la medida de cada perro, no de cada dueño. Aprenderemos cómo debe ser su sitio en la casa, la alimentación correcta…

¿Quieres asistir a nuestras clases para cachorros?
Los próximos 9, 16 y 23 de febrero, tres jornadas de Clases para Cachorros con doogweb y con nuestros perros, en El Casar de Talamanca (a 30 minutos de Madrid). Clases personalizadas para grupos de sólo 5 cachorros de 10 a 14 horas en tres sábados consecutivos (se puede asistir a uno, dos o los tres días).

Más información e inscripciones en info@doogweb.es o en el tel.: 680 819 075.