Higiene en el perro: Baños, uñas, parásitos, peluquería…

Aunque no todos los perros tienen las mismas necesidades de peluquería, en el resto de apartados sí que podemos seguir esta «guía práctica de higiene en el perro» para mantener a nuestros perros en «perfecto estado de revista». Comenzamos…

Higiene en los perros, cada cuánto tiempo y «el qué»

• Baño. Hay un refrán en el mundo del perro que dice «cepillar mucho, bañar poco», y es bastante cierto. Bañar a los perros en exceso es perjudicial al deteriorar la capa grasa del pelo, pero claro, eso no significa que no haya que bañarlos nunca. Entre dos a cuatro baños al año será perfecto para la mayoría de los perros.

• Cepillado. Diario, aunque en perros de pelo corto y poco mantenimiento podemos limitarlo a un par de cepillados a la semana. Es importante elegir el cepillo/peine/carda adecuado a cada tipo de pelo. Una buena idea, incluso en perros con pelo «complicado» es un cepillado rápido diario, y al menos una vez a la semana uno a fondo. Además cepillar a los perros es un momento de contacto con ellos.

• Dentadura. Es muy variable, porque hay perros que con apenas un año tienen problemas de sarro, y otros perros geriátricos están perfectos. Si tu perro lo necesita puedes cepillar a diario (o utilizar una gasa), y emplear productos específicos antisarro que se añaden al agua. También hay geles bastante efectivos como prevención.

• Peluquería. En la mayoría de los perros la peluquería no es necesaria, aunque en otras muchas sí. Consulta con tu veterinario para perros con necesidades especiales como el sripping o retoques en perros como el golden retriever.

• Corte de uñas. Sólo cuando se necesite porque las uñas hayan crecido demasiado. Cortar las uñas no es sencillo, y con frecuencia se producen hemorragias por cortar donde no se debe. Utiliza las herramientas adecuadas (alicates de corte específicos para perros) y vigila siempre que tus perros tengan las uñas con una longitud adecuada.

• Parásitos internos. No nos engañemos, por mucho que nuestros perros estén cuidados, se mueven en un mundo que no lo está tanto. Las desparasitaciones trimestrales nos garantizan que todo está bien. Recuerda, además, que enfermedades como la hidatidiosis se podría transmitir al hombre.

• Parásitos externos, collares. Los collares antiparásitos tienen una duración (teórica) de entre tres y seis meses. Pero esa duración se reducirá, por ejemplo, si los perros se bañan en la playa.

• Parásitos externos, pipetas. La mayoría de pipetas antiparasitarias (para prevención de leishmania, ácaros…) tienen una duración teórica de un mes. Si se aplica bien lo cumple. Dependiendo de la zona, puede utilizarlas de marzo a noviembre y «descansar» los meses de invierno.

• Limpieza de oídos. Los perros con orejas caídas (cocker, golden retriever…) son mucho más propensos a otitis y otros problemas de oídos. Los productos de limpieza se aplican fácil (son gotas que se aplican en el oído) y se pueden utilizar una vez al mes como prevención. Pero si el perro tiene cualquier molestia debemos acudir al veterinario, porque las otitis son muy dolorosas y pueden complicarse.