¿Debemos dar suplementos a nuestros perros?

Los suplementos alimenticios o nutricionales para perros pueden ser útiles… O algo innecesario

Hace muchos años, a los cachorros de razas «grandes» se les daba calcio como suplemento durante el crecimiento. Hoy sabemos que ese aporte extra de calcio puede favorecer problemas relacionados con la displasia de codo y cadera y otros.

¿Entonces suplementos sí o no?
Las comidas preparadas (pienso) de calidad, muy criticadas por el sector perruno que aboga por dietas BARF, son completas,y adaptadas a cada ciclo vital del perro. Así tenemos alimentación específica para cachorros de diferentes razas/tamaños, perros adultos y senior.

Es importante que los piensos para cachorros se adapten al crecimiento (tamaño final del perro), pero otras cuestiones como los piensos para «cada raza» son labores más marquetinianas que otra cosa (un pienso para cachorro destinado a un labrador no es diferente al destinado a un pastor alemán, por ejemplo). Los perros grandes deben crecer despacio, lo que evitará muchos problemas musculo-esqueléticos.

Algunos suplementos importantes (los 3 más empleados)
Condroprotectores. El suplemento más habitual y sobre el que existe más documentación que demuestra su efectividad es la glucosamina para perros. Pero ojo, también puede tener contraindicaciones.

Los suplementos vitamínicos son también frecuentes, pero casi siempre innecesarios. Solo son recomendables en perros convalecientes, después de cirugías importantes, hembras gestantes o lactantes, y otros casos en los que sea importante ayudar al organismo por carencias.

Omega y suplementos para el pelo. Si son naturales tienen pocos efectos secundarios (pero no olvides que el hígado es el órgano más castigado por los suplementos de todo tipo). Son útiles, «se notan», pero no hacen milagros. Un perro mudando no tendrá mejor pelo por inflarlo a aceite de salmón.

Cachorros, perros de deporte y perros mayores
Son los tres grupos en los que parece que los suplementos nutricionales son más necesarios. Y es cierto, pero no siempre. Por ejemplo, en los perros mayores es muy importante no castigar innecesariamente su aparato digestivo.Además es importante (y el verdadero punto clave de estas líneas) es recordar una y mil veces que los suplementos no son inocuos, y será mejor administrarlos de forma temporal y controlada.

Los suplementos, mejor naturales
En cualquier caso, los suplementos nutricionales (y lo podemos aplicar a nosotros mismos) deberían estar supervisados por el veterinario y nunca ser administrados «porque sí». Y por otro lado, los suplementos de origen natural serán siempre más seguros.

Si tu perro tiene un problema concreto o quieres prevenir por ejemplo el deterioro articular, consúltalo con tu veterinario y actúa en consecuencia. En la actualidad hay productos de gran efectividad, pero se deben utilizar de forma medida.