Enseñar a los perros está bien, pero hacerles felices está mejor
Nos obcecamos en enseñar a nuestros perros ciertas habilidades o comportamientos que nos interesan (por el motivo que sea). Pero con frecuencia olvidamos lo más importante.
Puede tratarse comportamientos útiles (por ejemplo sentarse para saludar a otra persona), o que practicamos en algún deporte (puede ser -por ejemplo- pasar por el túnel de agility)… Pero hay muchas cosas más importantes que podemos (y debemos) enseñar a nuestros perros, aunque no son tan llamativas.
- La calma. Sí, permanecer calmado es un estado emocional que se pueden entrenar. Si quieres llámalo «gestionar la excitación», pero el resultado es el mismo: Un perro que permanece calmado es un perro feliz.
- Atención. Para enseñar «cosas» a un perro, lo primero es que nos preste atención. El «focus» que dirían los anglosajones -y los más pedantes- es imprescindible, y además una atención consistente será síntoma de una buena relación guía-perro.
- Autocontrol. Los perros viven en un entorno humano, y en ese entorno no pueden hacer todo lo que quieran (en realidad nosotros tampoco podemos ¿verdad?). El caso es que un perro al que se le ha enseñado a autocontrolarse es un perro que será mucho más fácil de enseñar.
- Resiliencia. Es la palabra de moda, y hace referencia a la capacidad para sobreponerse a una situación complicada. Y la resiliencia en los perros también se puede entrenar.
- Ausencia de miedo. Los perros superan el miedo de dos formas, y las dos son importantes: por sus propios medios (ver punto anterior), pero también porque nosotros les aportamos seguridad. El efecto «base segura en perros» también se enseña (aunque en realidad nos lo debemos ganar), y después hace que todo sea mucho más fácil.
Ahora dedica unos minutos a visitar Youtube. Busca perros de deporte, habilidades caninas o cualquier otra actividad. Algun@s, solo aalgun@guías, han creado una relación saludable con sus perros, han conseguido comportamientos complejos sin obsesiones, con un entrenamiento emocional mejor -si cabe- que el físico. Ése es el secreto, la clave, que solo l@s mejores alcanzan.