¿Sufre tu perro o gato estrés postvacacional?

El retorno de las vacaciones nunca es fácil y para nuestras mascotas, tampoco

Perros en vacaciones: lo que debes tener en cuenta.

Después de pasar juntos el verano, ir de vacaciones, disfrutar de largos día en la playa o la montaña o bien estar más tiempo de lo habitual fuera de casa, la vuelta a la rutina también tiene consecuencias para nuestros peludos. Y es que ellos también sufren el conocido estrés “postvacacional”.Kiwoko, la mayor cadena de tiendas de animales de España, nos ofrece algunos consejos para superar la vuelta casa y seguir disfrutando del día a día juntos.

Durante las vacaciones nuestros mejores amigos pierden hábitos y rutinas establecidas, ya que solemos pasar más tiempo de lo normal junto a ellos y les proporcionamos más cariño y horas de juego. Por eso es normal que, a la vuelta, nuestros peludos sientan un malestar que puede llegar a provocar cambios en su comportamiento habitual.

  • Si nuestro perro ladra más de lo normal a la vuelta de vacaciones puede significar que echan de menos la compañía de su amo y sufren un principio de estrés postvacacional. En el caso de los cat lovers, si lo has dejado con alguien, la vuelta a casa puede suponer ansiedad por separación y uno de los indicios suele ser que deje de utilizar el arenero.
  • Si nuestro perro o gato empieza a tener comportamientos distintos como, por ejemplo, hace sus necesidades donde no debe, escarba en la basura o mordisquea muebles y zapatos, puede ser sinónimo de que no está recibiendo la atención y el ejercicio que necesita.
  • Si le cuesta salir a pasear o comer, al igual que los seres humanos, las mascotas necesitan tiempo y disciplina para volver a la rutina. Por eso debemos tener paciencia y estar al lado de nuestro peludo para que poco a poco todo vuelva a la normalidad.

Cómo viajar en verano con tu perro, consejos.

¿Cómo podemos ayudarles?
Para afrontar con buen pie la vuelta de las vacaciones Kiwoko recomienda mantener a nuestras mascotas ocupadas y estimularlas con paseos y actividades que puedan suplir las largas horas que pasamos fuera de casa.

Dejar siempre cerca sus juguetes preferidos puede ser otra buena opción para evitar el aburrimiento. Y, finalmente, también debemos recuperar la normalidad en cuanto a la alimentación pues, al igual que nosotros, ellos también cometen excesos en verano.

Por eso es muy importante volver a recuperar los hábitos alimenticios de siempre y velar por su salud, de esta forma podremos volver a disfrutar de los mejores momentos juntos también en septiembre.

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