Cómo prevenir la infección por Leishmaniasis canina
La Leishmaniasis no tiene cura, pero sí es prevenible en un porcentaje muy elevado de los casos. Como todos sabemos, el vector principal de contagio es la hembra del mosquito flebotomo. Este insecto está presente desde primavera a otoño, es fundamentalmente nocturno (también vuela al amanecer y anochecer), y capaz de efectuar desplazamientos de varios kilómetros en una sola noche, por otro lado se encuentran flebotomos en la casi totalidad de la Península Ibérica. Visto así, no parece nada fácil, sino más bien una pura cuestión de estadística o azar, una «ruleta rusa», prevenir la Leishmaniasis en nuestros perros, o al menos hacer todo lo posible para evitar el contagio de los protozoos responsables de la enfermedad. De hecho, en este estudio de la OMS (bastante denso, pero merece la pena leerlo al detalle) encontrarás datos espeluznantes sobre esta enfermedad en Europa. Sólo una cifra: en 1999, el 22,6 por ciento de la población canina de Atenas tenía Leishmaniasis. Es más, según este informa (repetimos, de la OMS), es un serio problema en el sur de Europa, y la tendencia es al alza, como se ha demostrado con el transcurrir de los años (página 38).
En otro documento, en este caso publicado por la revista profesional Redvet (click aquí para verlo), aparte de los detalles más que discutibles que se emplearon en Brasil para el estudio, se afirma en la página 15 que en ningún producto (champués, collares…) se ha comprobado su eficacia en perros…
Para complicar un poco más la cuestión, no existe en la actualidad ninguna vacuna eficiente. Sí se han localizado hasta 20 antígenos y se prevé que en un futuro pueda existir, pero ahora mismo la vacuna está en fase de desarrollo. Sí existe un tratamiento, que aplicado con prontitud puede hacer que el perro pase a una fasé «crónica», pero no existe una cura definitiva. Además, se puede transmitir al ser humano.
Muy pocos productos han conseguido una cierta eficacia para prevenir la Leishmaniasis en perros. Uno de ellos es el conocido collar Scalibor, que se promociona como «muy efectivo» en la prevención de picaduras del mosquito vector de la Leishmania canina (según la página oficial de Scalibor, en un estudio llevado a cabo en el sur de Italia, se alcanzó una protección del 97 por ciento de los casos). También contra garrapatas y pulgas la eficacia es muy elevada.
Los veterinarios con los que hemos hablado para documentar estas líneas, nos confirman la eficacia del collar Scalibor, aunque sin estudios concluyentes por su parte no les resulta posible aportar porcentajes concretos de eficacia entre los perros de sus clientes. El precio orientativo del collar Scalibor, en talla grande, es de unos 15 € en tiendas on-line, y la duración es de seis meses.