O por qué no funciona el castigo positivo
Las etiquetas nunca hacen justicia. De hecho el término «etiqueta» ya tiene algo de peyorativo, pero también es cierto que nos ayudan a ubicar determinados hechos y acciones. La denominada «educación en positivo» no escapa de ello, y los partidarios de la «línea dura» tachan a los que utilizan este sistema de «salchicheros». Mientras tanto, etólogos de todo el mundo apuestan por reforzar en lugar de castigar…
1. El castigo es muy difícil de medir en su intensidad y, por lo tanto, de aplicar en su justa medida. ¿Cómo de «fuerte» debe ser el castigo por tirar de la correa? ¿Y por comer porquerías? ¿Y por romper unas zapatillas…?
2. El castigo produce habituación. Si se utiliza será necesario incrementar la potencia para conseguir el mismo efecto, entrando en una espiral peligrosa y sin fin.
3. El castigo físico lleva asociado dolor… y puede llevar a una agresión refleja que nunca habría existido. Es especialmente delicado si no se le da al perro la posibilidad de huir.
4. Si el castigo provoca agresividad… estamos fomentando una agresividad que tal vez era inexistente.
5. El castigo produce problemas emocionales, ansiedad y estrés. Castigando creamos perros inestables, nerviosos e impredecibles.
6. El castigo se debería aplicar en el momento exacto, equivocarse en ello puede conllevar asociaciones indeseadas. ¿Somos capaces de conocer el momento exacto en el que se debe aplicar y qué asociará la mente del perro? Evidentemente NO.
7. El castigo puede obtener resultados inmediatos, pero NO son resultados fiables en el tiempo. Educar a un perro es incompatible con la prisa.
8. Cuando castigamos, prestamos atención al perro. La «atención» pasa a convertirse en un reforzador y al castigar fomentamos la conducta que queremos eliminar. Curioso ¿verdad?
9. El castigo NO es necesario, la inmensa mayoría de situaciones se pueden solucionar con refuerzos. Y si no somos capaces es que ha llegado el momento de recurrir a un etólogo.
10. Con el castigo NO se aprende la conducta correcta, el perro NO elige la conducta adecuada, NO aprende lo que es correcto y lo que no lo es. y sin embargo pueden suceder cualquiera de los 9 puntos anteriores, o varios de ellos. ¿Merece la pena?
Más información sobre los efectos del castigo en los perros en este archivo de la American Veterinary Society of Animal Behavior.
Además, yo incluiría que ningún tipo agresión o violencia JAMÁS está justificada.
¿Qué es eso de pegar o castigar positivamente a una persona?, ¿y a otro seres vivos? Son acciones abominables, injustificadas, indeseadas. Se recurre a ello, muchas veces, debido a la frustración, al no saber qué hacer.
¡Vamos!, y que a vosotros, los educadores que defendéis la postura positivista, os llamen «salchicheros». ¡Esa es la respuesta que tienen! Bueno, al menos son «graciosos» (lo digo con sarcasmo, claro está).
Así es Kuno… se nos supone una cierta inteligencia (dicen que «superior») lo que nos debería llevar a analizar problemas o situaciones, valorar opciones, elegir la mejor solución y aplicarla… O lo que es lo mismo, se nos presupone comportamientos capaces de solucionar de otra forma diferente a la simple violencia…
Prefiero que me llamen «Salchichera» que «Castigadora».
Efectivamente, con castigos, también se aprende, pero a qué coste?? …y cuáles son los recuerdos que se quedan???
En fin, mientras uno no tiene consciencia de lo que no sabe, no está capacitado para opinar quién hace mejor las cosas.
Un abrazo y gracias.
«Mientras uno no tiene consciencia de lo que no sabe, no está capacitado para opinar quién hace mejor las cosas». Frase acertada donde las haya, ¡un abrazo Pere!
En realidad el castigo fisico es algo no deseado sin embargo ayuda a fomentar la disciplina en el caracter de algunos perros cuya personalidad tiende a parecer autista en momentos. Entiendase por Castigo Fisico un Simple latigazo o un tiron fuerte de su collar. Nuestras manos actuan como dientes al momento en que adiestramos a nuestros cachorros por esta razon, es recomendado demostrar siempre la superioridad del amo en la envergadura del canino. Lo digo por experiencia y por la efectividad historica producto de ese hecho.
las letras con sangre esntran decian mi abuela. jajajaja no es cierot, me gusto mucho el articulo.
Mi comentario no va dirigido hacia el artículo, me parece fantástico, tanto como cualquier otro. Va más encaminado a la primera frase que ya leo en el y con el que no estoy de acuerdo. Lo copio con permiso aquí para hacer referencia al mismo.
«Las etiquetas nunca hacen justicia. De hecho el término “etiqueta” ya tiene algo de peyorativo, pero también es cierto que nos ayudan a ubicar determinados hechos y acciones.»
«Etiqueta» no es un término peyorativo, es más no es tampoco elogiosos.
En cambio «Peyorativo» palabra como se define en el artículo si ya pone en antecedentes la propia palabra y como tal por alcance, lo que a continuación define para bien o para mal.
El término «etiqueta», realmente define: «identificativo de algún producto»,»lenguaje informático de marcado utilizado»,»palabras clave»,…
Comento esto porque cuando inicio en la lectura de una forma aseptica, lo primero a lo que me obliga es al posicionamiento unilateral…
Por otro lado, el artículo así como su información no me desagrada.
Felicidades.
Gracias por el apunte Manuel.