Perros, miedo a los petardos y contracondicionamiento

Cómo solucionar el miedo a los petardos en los perros

Perros, miedo a los petardos y contracondicionamiento.

Se acercan peligrosamente las Navidades, uno de los peores momentos del año para muchos de nuestros perros por el alboroto que rodea todo, el ruido, ajetreo, las comilonas… y los petardos.

El miedo a los petardos, explosiones, tormentas y ruidos fuertes en general es uno de los más habituales en los perros. De hecho, es un sonido en absoluto natural (a excepción de los truenos de las tormentas) que sobresalta -en el mejor de los casos- y que puede llevar episodios de pánico asociados – en el peor-. No son raros los casos de perros perdidos por este motivo, llevados por el pánico. Perros que salen corriendo sin saber dónde, con el único afán de escapar de ese sonido que les aterroriza, se pierden en el laberinto de la ciudad con todos los peligros que eso conlleva.

Desensibilización, primera fase
De la desensibilización ya hemos tratado en artículos anteriores. Recordamos que, básicamente, se trata de someter al perro a la fuente de su miedo de forma controlada. Primero en sesiones cortas y suaves en intensidad, que se irán incrementando a medida que se vayan superando fases. Es un proceso lento, e incluso muy lento en fobias (y el miedo a los petardos es una fobia: acustofobia) que ya se hayan manifestado. Otros «métodos», como la inundación (someter al perro al origen de su miedo) sólo conseguirán aterrorizar al animal y bloquearlo. Emplear el castigo positivo (gritar, tirones de correa…) no sólo es ineficaz, sino contraproducente.

Pero… ¿qué podemos añadir a la desensibilización para conseguir mejores resultados y más rápidos? La respuesta es el contracondicionamiento.

Definiendo el contracondicionamiento
El contracondicionamiento, muy utilizado por los conductistas, es una técnica de condicionamiento clásico empleada para la modificación de conductas que se basa en asociar al elemento que perturba (los sonidos, petardos… -el estímulo condicionado-) un refuerzo positivo. Con sucesivas repeticiones, el estímulo condicionado pasará a asociarse al refuerzo positivo: ¡los petardos se habrán convertido en algo agradable para el perro!

Es una técnica muy sencilla de aplicar, rapidísima con cachorros y perros en los que no exista acustofobia grave, y muy efectiva. Con nuestros perros, desde cachorros, hemos aplicado está técnica: cada vez que se escuchaba un petardo, pelota o galletita acompañada de un «muy bieeeen». El resultado es que, hoy, ante un petardo… acuden con rapidez moviendo el rabo a buscar su «premio».

Un error de precipitación en el proceso de desensibilización será desandar todo lo andado hasta ese momento

En perros adultos con acustofobia, no es tan fácil, ni mucho menos. Debemos aplicar la desensibilización primero, apoyada en el contracondicionamiento… y tomarnos las cosas con mucha calma. No estamos tratando de enseñar un truco que el perro no comprende, no se trata de terquedad ni de exploración de límites: es miedo, y el miedo no se puede controlar con facilidad ni entiende de plazos ni repeticiones. Debemos comenzar con muy pocas repeticiones, breves y suaves, incrementando la presión a medida que observemos resultados positivos. Cuando el contracondicionamiento empiece a surtir efecto (el perro acude a buscar su premio ante un petardo lejano) estaremos en condiciones de incrementar la intensidad, pero siempre muy poco a poco y de forma paulatina. Tanto en cachorros como en perros adultos, nos podemos ayudar del clicker. Un error de precipitación en el proceso de desensibilización será desandar todo lo andado hasta ese momento.

Otras utilidades del contracondicionamiento
De igual modo, podemos utilizar esta técnica de modificación de conductas para eliminar todo tipo de conductas indeseables. Siempre asociando el refuerzo positivo, conseguiremos una efectividad asombrosa ante todo tipo de problemas, desde eliminar «vicios» como correr detrás de las bicis, hasta ladridos incontrolados asociados a «algo» (timbre, vecinos…). El condicionamiento clásico nos sirve para que el perro aprenda o «des-aprenda», sólo es necesario conocerle muy bien, para poder ofrecer refuerzos lo suficientemente atractivos.

2 comentarios en “Perros, miedo a los petardos y contracondicionamiento

  1. TENGO 66 AÑOS FUÌ ADIESTRADOR Y CRIADOR. ESTUDIE EN EL CLUB DEL OVAJARO ALEMAN .ETOLOGIA….ADMIRADOR DEL POF LORENZ,,
    CON GUSTO RESIBIRÈ INFORMACION,,
    LITO SALVADOR 011 15 55238841

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