La importancia de la motivación, rigurosidad y disciplina en el Rescate Canino

Por Mónica Rocamora Boschet.
El pasado día 1 de octubre comenzó el XXXV Curso Internacional Método Arcón de Búsqueda y Detección Canina (Personas con Vida Sepultadas, Narcóticos y Explosivos), que se desarrolló en la Escuela de Fuerzas Especiales Nº9 “Patria”, situado en la ciudad de Latacunga (Ecuador). Tomé la decisión de participar en este importante curso nada más tener conocimiento de que se desarrollaría, motivada por la certeza de que la Metodología Arcón es actualmente el sistema de formación e intervención de Equipos Caninos más efectivo en la localización de cualquier sustancia que emita el mínimo elemento odorífero.
Esto ya lo había constatado a pesar de mi escepticismo al principio, nacido de quien desconoce, en el primer Curso Internacional Método Arcón en el que decidí participar en octubre de 2009 junto a mi compañera canina Naia. En aquel entonces dicho curso se desarrolló en Ecuador, concretamente en el Grupo de Intervención y Rescate (GIR), de la Policía Nacional Ecuatoriana. Aquí, a pesar de las más de 250 horas de clase y semanales noches de arduo estudio, apenas pude atisbar los principios básicos y técnicos sobre la metodología arcón pero descubrí, totalmente fascinada, cómo los ejemplares caninos alcanzaban en pocos minutos la máxima efectividad en la localización y señalización de las personas vivas sepultadas de una forma totalmente autónoma, con una motivación y concentración que hasta entonces no había observado en ningún otro perro destinado a este tipo de trabajo…
Método Arcón forja nuevos Equipos Caninos que con apenas unos pocos minutos de formación, sin ningún proceso de moldeamiento y/o condicionamiento (salvo el condicionar el ladrido a la persona no visible y ubicada subterráneamente)
Un año más tarde volví a viajar, esta vez a la Escuela de Guías y Adiestramiento Canino de la Policía Nacional Colombiana, para seguir perfeccionándome en la metodología y de nuevo pude verificar que la disciplina y rigurosidad de Jaime Parejo García, autor científico del Método Arcón, forjaba nuevos Equipos Caninos que con apenas unos pocos minutos de formación, sin ningún proceso de moldeamiento y/o condicionamiento (salvo el condicionar el ladrido a la persona no visible y ubicada subterráneamente), gracias a la aplicación durante el proceso formativo de sus innovadoras siete técnicas conductuales, estos Equipos Caninos se encontraban en óptimas condiciones de intervenir en un operativo de búsqueda y detección real.
Hemos de recalcar que estos ejemplares no están consolidados sin embargo en el trabajo de búsqueda y detección y que es obligación del guía así como del Jefe de la Unidad Canina a la que pertenece el ejemplar, mantener la formación de sus Equipos Caninos (Guía y Perro), mediante la realización de ejercicios y/o entrenamientos técnicos totalmente dosificados e individualizados, para implementar aún más si cabe los niveles de autonomía, motivación y concentración de los ejemplares caninos durante el desarrollo de la búsqueda. En caso contrario, si carecemos de la rigurosidad, disciplina y conocimientos técnicos necesarios sobre la metodología y su correcta aplicación, la operatividad de dichos Equipos Caninos se vendrá al traste repercutiendo en la localización de posibles víctimas sepultadas de las cuales seremos (como Guías y Jefe de Unidad), corresponsables de su fallecimiento en tanto nuestros ejemplares caninos no posean la operatividad deseada esto es; que sean capaces de mantener una sólida línea de autonomía y concentración durante el desarrollo de la búsqueda, realizando búsquedas consecutivas aún en presencia de factores adversos y por encima aún del natural agotamiento del ejemplar…
De la gravedad de lo expresado anteriormente he podido darme cuenta estos últimos meses y por eso precisamente decidí tomar un paréntesis en todo cuanto estaba realizando hasta entonces y participar así en el XXXV Curso Internacional Método Arcón de Búsqueda y Detección Canina (Personas con Vida Sepultadas, Narcóticos y Explosivos).









