Consecuencias de la crisis

En las últimas semanas hemos visto cómo la interminable crisis económica arrastra a muchas personas a situaciones realmente complicadas. Pero son llegar a situaciones extremas -que por desgracia se dan con más frecuencia de lo que imaginamos- quien más quien menos tenemos que ahorrar en todo lo que podamos… Y los perros comen todos los días, así que es la partida más importante.

Aprovecha Internet
Si estás leyendo esto es que usas Internet, así que no tienes excusa para no aprovechar los recursos que nos brinda la Red. Las páginas de códigos descuento son el primer punto de partida. Puedes encontrar promociones y ofertas de todo tipo para el día a día (desde ropa, hasta ocio o viajes), pero también hay oportunidades como con estos códigos descuento Zooplus para ahorrarnos un buen puñado de euros y no tener que recurrir a alimentos de baja calidad. Siempre es buena idea comprar en cantidad (al fin y al cabo se va a consumir) y si tu perro es pequeño una excelente idea es ponerse de acuerdo con los amigos del parque que tengan perros de razas de tamaño parecido y después repartir.

Un pienso barato es el camino más rápido para gastar lo ahorrado en veterinarios. Diarreas, intolerancias, problemas de piel… «Somos lo que comemos», y eso es cumple también en los perros. Aprovechar las ofertas es muy diferente a escatimar.

Veterinario, imprescindible
Y hablando de veterinarios, si te mantienes informado, puedes aprovechar otras muchas situaciones, como las campañas de vacunación que realizan los Ayuntamientos precisamente por estas fechas. Recuerda que hay cosas en las que se puede ahorrar, pero en otras nunca merecerá la pena, como avisaban hace unos días desde el Colegio de Veterinarios de Barcelona. Algunos veterinarios ofrecen igualas interesantes (cubre vacunación, revisiones, analítica Leishmania, consultas…) aunque excluyen tratamientos e intervenciones (sí suelen ofrecer descuentos). Haz cuentas y analiza las diferentes ofertas, hay clínicas en las que merece la pena.

Otra opción que puede ser rentable, sobre todo con perros delicados, son los seguros veterinarios, aunque suelen excluir a los perros mayores de 10 años. Es muy importante leer con atención la letra pequeña, no es lo mismo «accidente» que «enfermedad», y nos podemos encontrar con que el seguro no cubra ni siquiera enfermedades comunes (y a veces de tratamientos largos), como otitis, tos de las perreras… Los seguros más completos, incluyendo intervenciones quirúrgicas por enfermedad (también por accidente), pueden tener un coste de entre 200 y 300 euros al año.

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