¿Hay perros más «atractivos» que otros para las garrapatas?
En pocas semanas las garrapatas comenzarán a estar más activas en nuestros campos y parques, poniendo en peligro a nuestros perros. Los métodos preventivos contra las garrapatas y otros parásitos son efectivos, sin embargo parece que no todos los perros tienen la misma predisposición a ser picados por garrapatas ¿o tal vez sí?
De qué depende que le pique una garrapata a un perro
El pasado mes de diciembre se ha publicado un estudio muy interesante sobre perros y parásitos. En ese estudio se analizaba las posibilidades de ser picado por un garrapata en diferentes perros que frecuentaban un parque de Bristol.
Una de las primeras conclusiones es que la presencia de garrapatas estaba condicionada directamente a la presencia de ciervos, siendo menos abundantes en los campos de cultivo (en nuestro entorno bien puede suceder lo mismo con ovejas, vacas, jabalíes, y también ciervos e incluso caza menor).
Los perros que frecuentaban el parque controlado en el estudio una vez por semana eran picados al menos por una garrapata por año. Pero los perros que frecuentaban el mismo parque todos los días de la semana, podían incluso ser picados varias veces a la semana.
Después de analizar los resultados, los investigadores llegaron a la conclusión de que las posibilidades de que los perros sean picados por las garrapatas son directamente proporcionales al tiempo de exposición a las zonas en las que habitan estos arácnidos en suficiente número.
Todos los perros son iguales para las garrapatas, las posibilidades de ser picados simplemente dependerán del tiempo que pasen en las zonas de riesgo, simplemente tiempo de exposición sin más, no hay otros factores que influyan (ni edad, ni sexo, ni siquiera el tipo de pelaje).
Para los investigadores, los perros se convierten así en buenos centinelas de control sobre la presencia de garrapatas, ya que son picados con mucha más frecuencia que los seres humanos.
Recomendaciones
Los antiparasitarios para los perros son imprescindibles, pero no son infalibles si no se administran bien. Si paseamos por zonas en las que sea frecuente la presencia de garrapatas, después de cada paseo deberíamos realizar una inspección del perro a conciencia. Las garrapatas transmiten enfermedades graves, y en nuestra mano está evitarlo.
• Más información: «Riesgo de infestación por garrapatas en los perros de un parque periurbano«, también está disponible en la revista «Parásitos y vectores» el estudio completo en pdf (aunque es una versión provisional).