Las razas de los perros marcan (mucho) su relación con el hombre
Lo comentábamos hace solo unos días en el artículo «La raza de los perros ¿Predice el comportamiento futuro?«, y sí, la raza pude influir mucho en las aptitudes de un perro, aunque no sea una garantía infalible. En el experimento que te presentamos hoy, los investigadores comprobaron las habilidades socio-cognitivas de los perros en tres momentos de su vida. Y los resultados van en la misma línea, pero con matices dependiendo de la edad del perro.
Tres tipos de perro, analizados a tres edades
La evidencia reciente indica que las habilidades socio-cognitivas de los perros y su comportamiento en una determinada situación de prueba están determinadas por factores genéticos y por las experiencias vividas (que a su vez están relacionadas -lógicamente- con la edad). En esta investigación se utilizó el paradigma «tarea imposible de resolver» para investigar el efecto de la raza y la edad/experiencia en el uso de una conducta humana (dirigir al perro mediante la mirada).
Después de una clasificación genética basado en los análisis recientes del genoma canino, los investigadores decidieron dividir los perros en tres grupos de razas, a saber: Perros de tipo primitivo, Perros de caza/pastoreo y Molosoides. Por otra parte, los experimentos se realizaron comprobando el comportamiento de los perros en tres edades; a los 2 meses, a los 4,5 meses, y como adultos.
Experimento y resultados
La prueba consistió en tres ensayos que tenían solución en los que los perros podían obtener alimentos mediante la manipulación de un contenedor de plástico seguido de un intento sin solución en el que la obtención de la comida se convirtió en labor imposible. Se analizó el comportamiento de los perros hacia el aparato y las personas presentes.
En los perros de dos meses de edad no hay diferencias entre los grupos de razas y, aunque el comportamiento de seguimiento del humano dirigiendo con la mirada se observó en aproximadamente la mitad de las crías, se produjeron durante períodos breves, lo que sugiere que la capacidad de comprender el comportamiento humano (dirigir la mirada y solicitud de ayuda por parte del perro) probablemente se desarrolla en un edad posterior, cuando los perros han tenido más experiencia con la comunicación humana.
Las diferencias de comportamiento entre los grupos según las razas, sin embargo, surgieron con fuerza en los perros adultos y, aunque menos pronunciado, también en los sujetos de 4,5 meses de edad.
Los perros del grupo de caza/pastoreo muestran significativamente un comportamiento dirigido al humano que los otros dos grupos de razas. Estos resultados sugieren que, si bien el proceso de domesticación puede haber influido en forma de habilidades comunicativas de los perros dirigidas a los humanos, la selección posterior de las razas de perros destinándolas a tipos específicos de trabajo podría también haber tenido un impacto significativo.
• Más información: El estudio se publicó en Animal Behavior.