Pues sí, pero hay mejores caminos para el conocimiento

Es un error que todos cometemos, y en algunos casos es mucho más que un error, porque se convierte en un problema muy serio. Acceder a todo tipo de información en Internet está muy bien, pero las fuentes no siempre son todo lo fiables que deberían.
Identificar las fuentes fiables y confiables
Las páginas web nacen y mueren en ciclos muy cortos. Es raro que sobrevivan apenas un par de años, y ésa puede ser la primera criba. Por lo general, las páginas que perduran en el tiempo son -al menos- «aceptablemente» fiables.
¿Se citan fuentes que a su vez tienen cierta relevancia y solvencia? No, la wikipedia no es una de esas fuentes que dan confianza. Sí lo son las universidades, o los profesionales reconocidos de cada sector (por ejemplo artículos firmados por especialistas en veterinaria, adiestramiento, etología…).
Si los artículos están trabajados y cuidados, al menos será agradable leerlos. ¿Ves abundantes erratas, fotos malas y una página en general poco cuidada? Los textos descuidados suelen ira acompañados de contenidos pobres o simples copia-pega.
¿Has visitado las redes sociales de esas páginas web? No todas las páginas se centran en las mismas redes sociales, pero con frecuencia sí son activas -al menos- en alguna de ellas. Además estas redes sociales se suelen utilizar como medio de intercambio de información y contacto.
Si la publicidad es extraña, intrusiva o no relacionada, es posible que estés en una página más centrada en sacar cuatro tristes euros que en dar servicio informativo.
En caso de que encuentres «copia-pega» de Wikipedia o de otros sitios de Internet estás antes una «página vampiro». No aporta nada nuevo, solo parasita otras páginas existentes aprovechándose del trabajo de otros.









