Los perros leen nuestras emociones en la cara

Sí, los perros leen nuestras emociones mejor que nosotros las suyas

Responder de forma adecuada a las señales emocionales es muy importante para todos los animales sociales.  Y las expresiones emocionales de los seres humanos y otros animales no humanos tienen analogías en su forma y función, lo que sugiere que pueden existir raíces evolutivas comunes, pero sin embargo se sabe muy poco acerca de cómo otros animales que no sean primates ven y procesan  las expresiones faciales. Resulta que en este estudio… se demuestra que los perros leen nuestras emociones en la cara.

Si nos remontamos siglo y medio atrás, Charles Darrwin ya pensaba que la forma y función de las emociones en animales humanos y no humanos posiblemente compartieran raíces evolutivas comunes… Ahora, en estudios recientes hemos sabido que los perros distinguen perfectamente las caras familiares, pero ¿cómo leen las emociones en los rostros?

Los primates leen mejor las expresiones faciales
En los primates, las expresiones faciales relacionadas con las amenazas son más exageradas en comparación con otros estímulos neutros o positivos. En este sentido, los investigadores exploraron si los perros domésticos (Canis familiaris) tienen un sesgo atencional hacia los estímulos amenazantes sociales, y si observan las expresiones emocionales humanas en los rasgos faciales (ojos, tercio medio facial y la boca).

Perros y señales de amenaza social
Mediante una tecnología conocida como «seguimiento del ojo» los investigadores finlandeses grabaron la mirada de de 31 perros domésticos de 13 razas diferentes durante la visualización de fotografías de la cara de seres humanos y perros con tres expresiones emocionales básicas (amenazante, agradable y neutra). Analizando los resultados encontraron que la mirada de los perros analiza sistemáticamente entre los rasgos faciales. La distribución de las fijaciones se vio alterada dependiendo de la expresión emocional, pero los ojos eran los objetivos más probables durante las primeras fijaciones de la mirada de los perros, e invirtieron más tiempo -por ejemplo- que mirando la boca. El examen de los rasgos faciales internos en su conjunto reveló diferencias de escaneo más pronunciadas entre las diferentes expresiones.

Las caras amenazantes de otros perros produjeron un estado de mayor atención, sin embargo al visualizar rostros amenazantes de personas, los perros… entraron en evitación

Esto sugiere que los perros leen nuestras emociones, y no basan su percepción de las expresiones faciales en la visualización de las estructuras individuales, pero si en la interpretación de la composición formada por ojos, parte media de la cara y boca. Los perros evaluados identificaron la amenaza social rápidamente y esta evaluación les llevó a un sesgo atencional, que dependía de las especies representadas: Las caras amenazantes de otros perros produjeron un estado de mayor atención, sin embargo al visualizar rostros amenazantes de personas, los perros… entraron en evitación. Los investigadores piensan que esto puede ser producto de la domesticación.

Los autores del estudio piensan también que las señales amenazantes que suponen una validez biológica diferencial se procesan a través de vías neurocognitivas concretas. Estos mecanismos pueden tener un significado adaptativo en los perros domésticos. Los resultados proporcionan una nueva perspectiva en la comprensión de la gestión de las expresiones emocionales y sensibilidad a la amenaza social en los animales no primates.

Más información: Estudio completo «Los perros evalúan las mirada de amenaza social por su validez biológica».