Peligros que podemos encontrar en las playas para perros
Nos gustaría que hubiera muchas, muchísimas playas para perros, pero a menudo olvidamos que además de diversión, esconden peligros para nuestros perros (y no solo porque no todos los perros saben nadar)…
Agua salada. Obvio, el mar es de agua salada, pero muchos perros se olvidan de ello y la beben. El resultado puede ser desde unas arcadas a deshidratación severa. Aunque tu nevera este repleta de cervezas, no te olvides de llevar agua dulce para tu perro.
Medusas. Si roza el pelo seguramente no pasará nada, pero en los belfos o la trufa, el contacto con una medusa es muy peligroso. Afortunadamente, como para nosotros también lo son (la carabela portuguesa puede llegar a ser mortal) la presencia de medusas suele estar controlada y se avisada.
Erizos de mar. Los erizos de mar no viven en las playas, sino en las piedras, pero es posible que nos encontremos con restos, caparazones… y espinas. Estas espinas no suponen un peligro grave, pero si se clavan en las almohadillas será muy difícil extraerlas (tienen unos dientecillos que lo impide).
Cortes. Desde latas, cristales… a las más naturales conchas de bivalvos, los cortes son muy frecuentes. Algunas roca son auténticas cuchillas, y con frecuencia se nos olvida que los perros no llevan zapatillas.
Peces venenosos. Los llamados «arañas», «faneca brava» (salvarios)… se esconden en la arena y en su espina dorsal portan un veneno que, sin ser mortal, es muy molesto.
Las playas para perros esconden muchos peligros para nuestros peludos, y aunque en la mayoría de ocasiones se solucionan con una visita al veterinario y una inyección de Urbason, lo cierto es que nos podemos llevar un disgusto perfectamente evitable con un poco de previsión. Ah, y ten siempre presente las precauciones básicas, ingestión de comida en mal estado, poner los medios para evitar el temido golpe de calor, etcétera.
¿Playas para perros? Depende, en Galicia por ejemplo tenemos un ave (chorlitejo patinegro) que está desapareciendo pocas parejas crían con éxito y parte de los culpables son nuestras mascotas.
Playas para perros sí pero sin poner en riesgo nuestra fauna.
hay poquitas playas para nuestros amigos. Por suerte yo he encontrado algunas calas «abandonadas» donde puedo llevarlos. La verdad es que se lo pasan genial , siempre teniendo cuidado de lo que habeis dicho