PETA sigue su guerra particular contra la Iditarod

PETA está intentando acabar con los sponsors de la Iditarod

Iditarod, La gran carrera de Alaska, es cada año más criticada por PETA

Después de Out-U-Go! Pet Care Services hiciera un guiño a la Iditarod en un reciente boletín informativo. PETA informó a la compañía que (según PETA) más de 150 perros han muerto desde que comenzó la carrera y que muchos perros que participan sufren fracturas por estrés y desarrollan neumonía, virus, úlceras sangrantes y otros. dolencias En respuesta, Out-U-Go! se comprometió a no volver a promocionar el Iditarod, PETA le envió una caja de chocolates veganos en agradecimiento…

Esto que parece una anécdota, es solo un ejemplo más de la estrategia de PETA para acabar con el mushing de alta competición.

Estrategia de PETA para debilitar la Iditarod
«Out-U-Go! hizo lo correcto al denunciar a una raza que obliga a los perros a correr hasta 100 kilómetros por día hasta que sus patas sangran y sus cuerpos ceden«, dice Tracy Reiman, vicepresidenta ejecutiva de PETA. «Cada compañía que corta lazos con Iditarod está ayudando a PETA a acercarse un paso más para terminar con esta crueldad extrema«.

Los datos de la Iditarod 2019
Según los datos de PETA, «un total de 235 perros fueron sacados de la carrera durante el Iditarod de este año debido a agotamiento, enfermedad o la lesión, y un perro llamado Oshi murió dos días después de cruzar la línea de meta, según informes, debido a una neumonía por aspiración, lo que significa que desarrolló una infección pulmonar mortal después de haber inhalado su propio vómito, que es la principal causa de muerte para los perros que fallecen en esta carrera».

Pero no acaba ahí la crítica, PETA ataca duro, afirmando que… «Durante la temporada baja, muchos perros languidecen en los criaderos donde están amarrados o confinados a corrales pequeños en todos los climas extremos, a menudo con poco más que cajas de plástico en ruinas o barriles para refugiarse. Este tipo de aislamiento causa angustia mental extrema a los animales del grupo social. Aquellos que se consideran no aptos para competir pueden ser asesinados de maneras espantosas, incluso ser golpeados o disparados».

Más compañías que se unen a PETA
Out-U-Go! se une a varias compañías, entre ellas The Coca-Cola Company, Jack Daniel´s , State Farm, Wells Fargo, Costco, Maxwell House, Nestlé, Pizza Hut, Rite Aid y Safeway, que han roto los lazos con Iditarod, y PETA ahora está llamando Alaska Airlines, Chrysler y Millennium Hotels and Resorts para que sigan su ejemplo

En la Iditarod 2012, un musher logró reanimar a su perro desde una parada cardiorespiratoria producida por un colapso, practicándole el boca a boca.

La postura del American Kennel Club

Al American Kennel Club AKC le preocupa que las leyes arbitrarias contra el uso de correas en los perros puedan socavar actividades caninas positivas como el adiestramiento de perros, el aseo, las pruebas de campo, las exposiciones caninas de belleza, el uso de perros de servicio y otros exámenes que son parte de la propiedad responsable de los perros.

Hay muchos casos de correas que fomentan un vínculo saludable entre el perro y el dueño. Por ejemplo, es común que los dueños de perros de trineo usen amarres deslizables y casetas para perros a prueba de la intemperie para garantizar el confort, la aclimatación, la libertad de movimiento, la compañía y la seguridad de las razas del norte que prosperan en climas fríos.

También se debe tener en cuenta que el atado de los perros con estas correas deslizables proporciona más espacio que una perrera medida de manera similar: un cercado de 10 x 10 le da a un perro 100 pies cuadrados de espacio, pero una correa deslizable de 10 pies proporciona a un perro 314 pies cuadrados de espacio.

Un estudio de la Escuela de Medicina Veterinaria de la Universidad de Cornell sobre perros de trineo concluyó que «nuestros hallazgos no proporcionan evidencia de que las ataduras deslizables fueran más o menos perjudicial para el bienestar de los perros que estar alojados en corrales» e instó a otros estudios controlados.

Y desde el AKC concluyen: «Una forma mejor y más efectiva de proteger a los perros del maltrato es garantizar el cumplimiento de las leyes de crueldad y negligencia, independientemente del método de confinamiento que elija un propietario«.

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