Perros detectores de COVID en entornos reales ¿cómo son de precisos?
Los diagnósticos oportunos y precisos son esenciales para combatir la pandemia de COVID-19, pero ninguna prueba satisface ambas condiciones.
En teoría, los perros pueden identificar los olores únicos de los compuestos orgánicos volátiles generados durante la infección al interrogar a las muestras o, idealmente, al cuerpo de un paciente…
Después de entrenar a 6 perros para detectar el SARS-CoV-2 mediante el olfato en las secreciones respiratorias humanas (diagnóstico in vitro), los investigadores volvieron a entrenar a 5 de ellos para buscar y encontrar la infección al oler directamente al paciente (detección in vivo).
Luego, se diseñaron ensayos de eficacia para comparar el rendimiento diagnóstico de los perros con el de la rRT-PCR en 848 sujetos humanos: 269 pacientes hospitalizados (prevalencia de COVID-19 30,1%), 259 personal hospitalario (prevalencia 2,7%) y 320 pacientes del gobierno. empleados (prevalencia 1,25%).
El límite de detección in vitro fue inferior a 10-12copia ssRNA / mL. Durante los experimentos de eficacia in vivo, los 5 perros detectaron 92 pacientes COVID-19 positivos entre los 848 sujetos del estudio.
La alerta (acostado) fue inmediata, con 95,2% de precisión y alta sensibilidad (95,9%; IC 95% 93,6-97,4), especificidad (95,1%; 94,4-95,8), valor predictivo positivo (69,7%; 65,9-73,2), y valor predictivo negativo (99,5%; 99,2-99,7) en relación con rRT-PCR.
Pruebas de perros detectores de COVID en entornos reales
Setenta y cinco días después de finalizar los experimentos de eficacia in vivo, se ejecutó un estudio en la vida real (efectividad in vivo) entre los usuarios del Sistema Metro de Medellín, desplegando los equipos humano-canino sin previo entrenamiento ni anuncio.
Se utilizaron tres perros para examinar el olor de 550 voluntarios que aceptaron participar, tanto en la prueba con caninos como en la prueba rRT-PCR. El valor predictivo negativo se mantuvo en 99,0% (IC 95% 98,3-99,4), pero el valor predictivo positivo se redujo al 28,2% (IC del 95%: 21,1 a 36,7).
La detección de olores por equipos caninos in vivo es una prueba de detección altamente precisa para COVID-19 y detecta más del 99% de las personas infectadas independientemente de las variables clave, como la prevalencia de la enfermedad, el tiempo posterior a la exposición o la presencia de síntomas.
Sin embargo, los investigadores concluyeron que se requiere entrenamiento adicional para enseñar a los perros a ignorar la contaminación por olor en condiciones de la vida real.
• Más información: Estudio completo.